La Decana de la FCom recibe una Mención de la Asociación de la Prensa de Sevilla
Palabras de agradecimiento de M.ª del Mar Ramírez Alvarado tras recibir la Mención de la APS en el acto de entrega de los XXIX Premios de la Comunicación, celebrado el 21 de febrero en la sede de la Fundación Cajasol, en Sevilla
Autoridades, compañeras, compañeros:
Quisiera comenzar agradeciendo a la APS por esta mención que no me esperaba y que he vivido en estos días con mucha alegría por diversos motivos.
Por una parte, creo que reconoce el trabajo que se hace en los decanatos de las facultades que es mucho, que es arduo en ocasiones y que requiere implicación, tiempo y esfuerzo, así que desde aquí comparto este momento con la Conferencia de Decanos y Directores de Centro de la US y también con la Junta Directiva de la Asociación Española de Universidades con Titulaciones en Información y Comunicación de la que he formado parte en estos años.
La segunda cuestión referida en este reconocimiento es que viene dado, por una parte, porque he sido la primera mujer decana de mi facultad y la primera en repetir en el cargo. En relación al hecho de ser mujer van dos reflexiones.
Por una parte, quisiera destacar la feminización de las carreras de comunicación que es un rasgo comúnmente generalizado en toda España. Y también suele haber más presencia de alumnas en Másteres oficiales y en nuestro Doctorado. Pero no sólo son más las chicas las que se forman en nuestra facultad sino que también obtienen excelentes calificaciones y mejores notas medias.
Por tanto, las mujeres son mayoría y están académicamente bien preparadas, pero se encuentran con un problema al terminar sus estudios y es que no son acogidas en condiciones de igualdad por el mercado de trabajo, tienen menos posibilidades de ocupar puestos directivos y son contratadas en cargos “menos visibles”. Según el último Informe de la Profesión Periodística 2021 que elabora la Asociación de la Prensa de Madrid, unos cuantos parámetros habían mejorado después de la debacle del Coronavirus. Pero uno se mantenía igual y es que las mujeres periodistas, que salen en mayor número de nuestras facultades, representan el 62% del paro registrado, un porcentaje que apenas ha variado a lo largo de los últimos años.
La segunda de las reflexiones sobre el hecho de ser mujer me sitúa en mi propio espacio, en la universidad, para mencionar que también nos queda aquí por avanzar. El porcentaje de decanas y directoras de departamento ha venido siendo, aproximadamente, de un 30% en el conjunto de las universidades. La primera mujer que llegó a Rectora en España lo hizo tarde, en 1982, y a partir de ahí muy pocas han llegado a este cargo. En 2020 había una “cifra récord” de nueve mujeres rectoras en las cincuenta universidades públicas españolas, por cierto dos de ellas andaluzas (las rectoras de la Universidad de Granada y de la Universidad de Huelva).
Pero es que para ser rectora hay que pasar primero por ser Profesora titular y después catedrática de universidad. Si nos vamos a las cifras, hay en torno a un 21% de mujeres catedráticas. Y para llegar a obtener la acreditación previa hay que tener resultados de investigación que se consiguen mejor si se obtiene financiación… y he aquí la madre del cordero ya que nos seguimos moviendo en un terreno de hombres. Los avances son muchos y las voluntades más que manifiestas, pero los datos objetivos nos muestran que en la universidad se siguen reproduciendo patrones que deben cambiar.
Durante estos ocho años en el decanato, y he aclarar que con excelentes compañeros que hoy son queridos amigos, he formado equipos integrados en más de un 70% por profesoras ya que soy una fiel militante de la importancia de situar a las mujeres en puestos de responsabilidad. A estas Vicedecanas las he visto avanzar en sus carreras académicas con bebés a cuestas, dando pecho, superando enfermedades, exprimiendo cada minuto de su jornada y sin descuidar sus responsabilidades. A ellas, y también a ellos por supuesto, los recuerdo hoy porque si he podido ejercer mi función ha sido por su respaldo.
A estas alturas no debería recibirse una mención por ser la primera mujer en algo (lo de repetir en el cargo si que quizá tiene un plus, al menos en la universidad ya que son cargos electos y las reelecciones son fruto de la valoración del trabajo realizado). Sin embargo he de decir, por todo lo mencionado, que agradezco en lo profundo a la Asociación de la Prensa de Sevilla el espíritu de este reconocimiento que va mucho más allá en su visión y que pone el acento justo donde debe estar. Y, precisamente por ello, dedico esta mención a las periodistas que han salido de nuestras aulas y que han sabido abrirse espacio a paso firme, así como a las alumnas y a las profesoras de mi Facultad haciendo votos porque el camino les sea cada vez más fácil y menos costoso de recorrer.
Aún queda mucho por batallar en nuestro ámbito de la Comunicación, lo sabemos en carne propia todos los que estamos aquí hoy. Pero creo, Rafael, que en estos años en los que hemos coincidido nos hemos dado la mano y hemos remado en la misma dirección. Desde la Facultad de Comunicación agradezco el trabajo de la Asociación de la Prensa de Sevilla y su presencia centenaria en el mundo de la Comunicación y esos brazos siempre abiertos para acoger a nuestros estudiantes una vez que cruzan el umbral de la Avenida Américo Vespucio. Sois para mi una extensión…
Y me despido ya felicitando a quienes han recibido distinciones el día de hoy. También enviando un beso desde aquí a mi familia (la presente y la que está lejos), agradeciéndoles por ser siempre ese refugio y ese núcleo de fortaleza que insufla ánimos y nos mantiene en pie. MUCHAS GRACIAS.