Dejaron Huella: Belén Zurbano (Licenciada en Periodismo – Promoción 2005-2010)
De una sensatez abrumadora para una alumna. Inquieta, participativa, combativa, comprometida, trabajadora, luchadora, humana, feminista y casi un poco sideral. Licenciada en Periodismo, Máster en Comunicación y Cultura y Doctora Cum Laude con mención internacional en Periodismo. Todo esto y mucho más es Belén Zurbano Berenguer. Nunca acepta un no por respuesta y hace crecer y aprender a sus maestros al tiempo que ella hace camino.
La recuerdo en clase, siempre en las primeras filas. Siempre atenta. Siempre con una aportación valiosa. Con esa mano alzada apuntando al cielo (al que llegaría si hiciera falta) como si estuviera en sus primeros cursos de infantil y tuviera que hacerse notar entre el resto de compañeros. Con esa ingenuidad e ilusión que caracteriza a unos pocos y que los hace diferentes.
Belén siempre destacó, tuvo el mejor expediente de su promoción y también fue premio extraordinario de Doctorado. Pero supo señalarse no sólo en lo académico sino en lo humano. Sabía hacer equipo, fue elegida entre sus compañeros de clase para el acto de graduación, todos querían hacer con ella los trabajos en grupo, firmó proyectos de cooperación al desarrollo que la llevaron a África con un bonito y necesario trabajo que ponía la comunicación en el centro del desarrollo regional.
Su contrato de Personal Universitario en Formación (PUF) de la Universidad de Sevilla le permitió hacer un doctorado brillante. Con estancias de investigación en Marruecos, Madrid y Bilbao en las que dejó su granito de arena y de la se trajo experiencias incomparables. Pocos doctorandos tienen claros sus objetivos al comenzar y ella apuntaba ya a la línea de meta, a la que llegó justo cuando se lo había propuesto con una hermosa barriga de siete meses que después se llamó Ismael, que le recolocó algunas de sus prioridades vitales y la afianzó en otras.
Recuerdo un artículo suyo en el Diario de Córdoba en el que daba las gracias a la sanidad pública y al equipo médico que la había atendido. A corazón abierto, sin ambages y de frente. Otra vez ella, Belén.
Su producción científica, centrada en los estudios de géneros desde la perspectiva de la comunicación, abruma para su juventud y trayectoria. Y pelea a diario contra el sistema al tiempo que cumple con él. Belén llegará a ser una gran maestra de maestros/as. Porque lo suyo es vocacional. Porque los maestros (los que se escriben con mayúsculas) hacen a sus alumnos mejores que ellos mismos. Y ella lo hará, cuando llegue, que llegará.
